Mi estudio fué la obra perfecta, disfruté su creación como cuando estás pintando un cuadro que fluye que se va creando sin ninguna duda, la sensación de que estás haciendo algo maravilloso, tanto que no piensas en lo practico sino en lo que te pide el edificio lo que es correcto para esa estructura.
Lo primero fué desnudarlo del todo, me sorprendió tanto que entendí lo que hacia falta hacer, solo darle lo que pedía y el resultado es el que veis.